En las últimas semanas se observan a diario, desde la madrugada, largas filas de personas que buscan validar certificados médicos en las unidades médicas del IESS para obtener el llamado subsidio por enfermedad.
La expansión de los casos de covid-19 ha hecho que se incremente la demanda de un servicio que sigue siendo limitado y lento. El Seguro Social no ha respondido en forma adecuada a la contingencia y exige que quienes tengan más de tres días de descanso médico acudan en forma presencial a entregar la certificaciones, con los riesgos que esto conlleva, no solo por posibles contagios, sino por un posible ataque de la delincuencia al estar horas de pie en la vía pública.
En esta época, con el uso de la tecnología, el IESS debería facilitar a sus afiliados la posibilidad de ingresar los documentos en forma digital. Por ahora, esto se da solo para quienes tienen permisos por hasta tres días, pero hay quejas por problemas en la plataforma.
“Debería facilitar a sus afiliados la posibilidad de ingresar los documentos en forma digital”.
Desde luego, deberían mantenerse las ventanillas para quienes deseen hacer el trámite presencial o no tengan los recursos tecnológicos a su alcance.
Es inadmisible que el IESS obligue a sus afiliados -o a los allegados de estos- a enfrentar riesgos, perder tiempo y recibir un trato poco humano para entregarles una prestación a la que tienen pleno derecho.
Editorial de El Diario publicado este jueves 20 de enero del 2022 en nuestra edición impresa.
