A propósito de la liberación del precio de la gasolina Súper, que alcanza en algunas estaciones de servicio hasta 3,17 dólares, varios conductores optan por cambiarse a la gasolina Ecopaís cuyo precio oficial es 1,85 dólares.

El cambio maneja dos hipótesis, si pasan de la gasolina Súper (mayor octanaje) a la Ecopaís (menor octanaje), el carro puede sufrir daños en la bomba de gasolina, filtros y microfiltros. 

Así lo explica el mecánico Edison Menéndez. Este principio también aplica al revés. Según el experto, hay combustibles con mayor octanaje que no son bien recibidos por algunos vehículos. En otras palabras, un combustible de buena calidad no siempre es bueno para un carro con un motor pequeño o un motor viejo porque puede alterar su funcionamiento.

Bolívar Solís, otro mecánico consultado por este medio, asegura que estos cambios no compatibles en términos de combustible con los vehículos generan daños en bombas de gasolina, inyectores y microfiltros. En carros de mayor antigüedad pueden tapar el carburador.

Para evitarlo, ambos mecánicos recomiendan saber el estilo de carro, cómo funciona y cuál es la gasolina que más le conviene. 

En cambio, para el mecánico Alejandro Catagua se trata de ser paciente. Asegura que el cambio de gasolina solo hace que el carro cascabelee por un momento, pero después de un tiempo el automotor se adapta al nuevo tipo de gasolina.

Conductores. La taxista Débora Mendoza dice que el cambiarse de combustible debido al alza por la eliminación del subsidio y liberación de precios de la gasolina Súper, ha generado daños en su vehículo. Cada dos meses ella debe dejar de trabajar para cambiar la bomba de gasolina de su automotor porque el combustible de mala calidad le cobra factura. Requiere 80 dólares para solventar el daño. 

Yuri Polanco sostiene que no se puede hacer nada con la subida del combustible.

Aunque asegura que el utilizar gasolina de más baja calidad perjudica a su automotor.

El ciudadano Fabián Palma utilizó gasolina Súper por seis años, pero debido al nuevo precio del derivado optó por llenar el tanque de combustible con la gasolina más barata, según él por la falta de dinero.

Colombo Arteaga, presidente de la Asociación de Distribuidores de Combustibles y Derivados de Manabí, asegura que no le dicen la verdad al país. 

“Las personas ya no quieren comprar Súper y se cambian a la Ecopaís. Eso implica que el Gobierno siga perdiendo dinero porque los 100 (cifra no oficial) millones de dólares que se ahorraron quitan el subsidio a la Súper y lo gastan en la producción de Ecopaís”, añade.

Para Arteaga, ese tipo de gasolina es amigable para el medio ambiente, pero dañina para el parque automotor. Al margen de esa situación, menciona que los combustibles no pasan por una prueba de calidad igual que en países como Estados Unidos.