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Parque
Temen que Las Vegas se afecte con crecientes

El invierno se aproxima y a Liria García le preocupa que no se haya dragado el río Portoviejo ni hecho una limpieza.

Sábado 25 Noviembre 2017 | 04:00

García vive en la calle 26 de Septiembre, frente al parque Las Vegas, y considera que si no se ejecuta el trabajo, una crecida del río puede afectar las casas cercanas y al propio parque que está en construcción.

Ella dice que ahora tiene una buena vista hacia la nueva infraestructura, pero no deja de pensar que el invierno llene de agua el sector.
Recordó que la tierra va cediendo más año a año por las corrientes del río.
Ofelia Ganchoso también ha vivido toda su vida (66 años) en este mismo sector y señaló que hasta ahora aprecia que el parque quedará bonito, pero su preocupación es cuando el río crezca.
En los inviernos fuertes, advierte, ha sido testigo de que el río arrasa con todo y trae diferentes tipos de escombros.
Por eso cree que la zona del parque quedará llena de lodo.
“El río busca su cauce. Se debió hacer muros de gaviones para que el agua no suba”, recalcó.
La zona a la que hacen referencia estas vecinas ha sido considerada por las autoridades municipales  como área inundable dentro del parque.
Diseñador. Gustavo González, diseñador del parque, es consciente que el área dejará lodo y palizada, pero indicó que es normal cuando hay una inundación, porque no se está haciendo buen manejo de laderas en toda la cuenca del río.
Dijo que la palizada se limpiará y el lodo no les preocupa porque lo que hace es abonar el suelo y el césped incluso vuelve a crecer.
González señaló que Las Vegas es parte de un sistema de parques que está planeado para la ciudad y de reservas naturales, que van a ayudar a mitigar el riesgo de inundaciones para Portoviejo.
Explicó que se retiraron los rellenos que había por la calle 26 de Septiembre y  se abrió más la orilla, por lo que cuando el agua del río llegue a este tramo se ampliará y bajará su velocidad, lo que permitirá que el agua no golpee con tanta fuerza a la orilla de la calle 26 de Septiembre.
Altura. González dijo que como el parque está pensado, va a poder manejar diferentes niveles de inundación. Por ejemplo, en un invierno moderado el agua tendrá una cota de 33 metros, en un invierno fuerte se puede inundar hasta una cota 34 (metros sobre el nivel del mar), y en un fenómeno El niño alcanzará los 36,5 metros; mientras que la infraestructura del parque se encuentra a 38,5 msnm.
“Eso significa que todo el resto del parque va a estar protegido”, indicó al explicar que los registros se realizaron con expertos en hidrología y se diseñó 
con márgenes de seguridad.
Las plantas que se han sembrado en esta área también se beneficiarían con la misma agua del río, pues es una vegetación tolerante. “Puede ser que se caigan algunas, pero son plantas que van a rebrotar”, afirmó. 
Anque existen tramos en que el río está angosto, González señaló que no se puede ampliar porque es delicado. 
“Cualquier cosa que nosotros hagamos en el río, aguas arriba o aguas abajo, va a tener repercusión”, señaló, 
Agregó que limpiando el cauce no se va a solucionar el sedimento, pues hay que tratarlo del origen. “No es un tema de cauce, el río es mucho más, es la cuenca”, manifestó.
 
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