El fuerte oleaje del martes y la madrugada de ayer afectó a Crucita. La parte céntrica del malecón luce con arena y en Los Arenales, Los Ranchos y Las Gilces hay temor por la destrucción que dejó el agua, que ingresó varios metros, afectando tramos del malecón y varias casas.

Los Arenales.  Dos familias, de Los Ranchos y Balsamaragua, fueron reubicadas  en casas de parientes.

Una tercera, la de Dolores Moreira, en Los Arenales, está afectada. Ella teme perder su vivienda; dice que el oleaje se llevó lo que quedaba de malecón y el suelo está socavado. 

Moreira se resiste a salir y dice que el Gobierno Provincial iba a poner piedras en el sector, pero los evisceradores de pescado de las ramadas se opusieron. 

Cuenta que el tramo donde el Gobierno Provincial ubicó piedra escollera no tuvo problemas esta vez.

Por su parte Dídimo Delgado, miembro de la cooperativa de pescadores, dice que ellos no se oponen a sacar las ramadas, pero quieren que el alcalde asigne un terreno para esta actividad, de la que viven 6 mil personas. Para él, la solución es la construcción del muelle pesquero artesanal para frenar la arremetida del mar.

Los Ranchos. En Los Ranchos y Las Gilces también hay daños, según Lorena Chóez, presidenta del Gobierno Parroquial de Crucita.

La funcionaria informó que son diez las casas en peligro; pero los vecinos dicen que es fácil observar más viviendas de todo tipo al filo de lo que queda del malecón. 

Chóez señaló que el municipio coloca piedra escollera y el GAD parroquial material de relleno.

Otra cifra. El Municipio de Portoviejo emitió un boletín de prensa en el que se proporciona otra cifra de afectados.

Citando a Julio Celorio, director municipal de Riesgos y Gestión Ambiental,  dice que “en Los Arenales son 5 viviendas cuyos cerramientos podrían ser afectados y dos casas en Los Ranchos, si no se realizan las obras de protección”.  

Diego Vélez, director municipal de Obras Públicas, informó que con maquinaria alquilada construyen un muro en Los Arenales.

En Los Ranchos se contrató la colocación de piedra escollera en una longitud de 200 metros, pero por los daños habrá que revisar para ampliar la intervención, indicó. Ayer se trabajó en ambos frentes. “Cuando pase el aguaje reconformaremos el malecón”, anunció Vélez.