En Portoviejo varias calles amanecieron hechas “piscinas”. Cuatro árboles se cayeron.

Alexis Macías, observador meteorológico del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), manifestó que en esta ciudad fueron siete horas de lluvia permanente (desde las 00h00 hasta las 07h00).

En otros cantones la lluvia no fue fuerte, pero se mantuvo por más de 12 horas.

Decenas de llamadas de auxilio recibió ayer la Empresa Pública Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Portoviejo (Epmapap).

El gerente, José Santos, dijo que atendieron emergencias en la ciudadela Municipal, sector del hospital de Solca, paso lateral donde hubo urbanizaciones inundadas, así como en la escuela República de México, donde el alcantarillado interno rebosó.

El funcionario aseguró que cuentan con tres sifoneros, a los que ayer se iba a unir un cuarto que estaba en reparación, dos cuadrillas para problemas en el sistema sanitario y dos retroexcavadoras.

Estragos. Los árboles se cayeron detrás de la cárcel de mujeres en la ciudadela El Progreso, otro en el callejón Santa Gema, uno en el parque Forestal y el último en la ciudadela Nuevo Portoviejo sobre el canal de riego.

En la vía al muladar las aguas lluvias cruzaron la carretera con fuerza y formaron una especie de “catarata”, socavando las bases de la baranda de protección metálica. El lodo fue a dar a la cancha de cemento frente a la escuela Fe y Alegría.

En Las Cumbres de la parroquia San Pablo el deslizamiento del suelo provocó que la vivienda de Eder Castro se hundiera.

Chone. La fuerte lluvia caída la noche del domingo y madrugada de ayer inundó varias calles de Chone. La Pichincha, 7 de Agosto y sus transversales fueron las más afectadas.

Asimismo moradores de la ciudadela Jardines del Inca indicaron que el rebose por las alcantarillas de las aguas servidas causó estragos en su sector. Diocles Zambrano, habitante del sitio El Guabal, manifestó que cerca de las 04h00 el agua proveniente del río Garrapata ingresó a su propiedad.

El río Mosquito también se desbordó. Octavio Castillo, secretario del Comité de Operaciones Emergentes (COE), aseguró que en este cantón llovió más de 24 horas consecutivas.

En horas de la tarde un muro se rompió en el cauce del río, cerca a la parroquia San Antonio, lo que causó que las aguas del estuario entraran e inundaran varias casas.
Wagner Zambrano, presidente parroquial, manifestó que con el objetivo de que las aguas evacuaran rápido se abrió un muro en la vía a La Margarita.