La Secretaría de Cultura de México cuestionó este domingo a la empresa estadounidense Levi’s por usar diseños de indígenas mexicanos en sus prendas sin contar con la autorización ni haber retribuido por los derechos de autor a la comunidad de donde son originarios.
La secretaria Alejandra Frausto envió una carta a la empresa Levi’s México y otra al colectivo Dracco Textil, que colaboró con la compañía, para que “se explique públicamente con qué fundamentos se comercializa y privatiza una propiedad colectiva”.
“Se trata de un principio de consideración ética que, local y globalmente, nos obliga a hacer un llamado de atención y poner en la mesa de la discusión pública un tema impostergable: proteger los derechos de los pueblos originarios que históricamente han sido invisibilizados”, indicó Frausto.
La Secretaría de Cultura denunció en un comunicado que la colección “Levi’s Premium, Original Trucker Jacket” contiene en sus pantalones y chaquetas elementos bordados que pertenecen a la cultura mazateca de la comunidad San Felipe, Jalapa de Díaz, de Oaxaca, estado del sur de México.
Según la dependencia, la compañía no utilizó el “mecanismo adecuado para obtener el permiso de dicha comunidad”.
Frausto citó en sus cartas la Ley Federal de Derechos de Autor del Estado Mexicano, que señala que las obras “no se pueden utilizar sin la autorización por escrito del pueblo o comunidad titular”.
La legislación también exige una “retribución justa y equitativa en beneficio de los titulares de los derechos”.
“Principios que su marca no está cumpliendo, en tanto que los diseños han sido recortados para ser aplicados a prendas industrializadas; no indican el nombre de las comunidades y no existe retribución alguna hacia los dueños de dichos diseños”, aseveró la secretaria Frausto en su carta.
El cuestionamiento es una muestra de la creciente lucha del Gobierno de México contra, según considera, el plagio que hacen las marcas internacionales de los diseños indígenas.
La Secretaría de Cultura acusó en mayo pasado a la española Zara y a las estadounidenses Anthropologie y Patowl de apropiación cultural por lanzar ropa con elementos de pueblos oaxaqueños.
En este contexto, la dependencia celebra desde el jueves hasta este domingo el festival Original, un espacio anual para reivindicar los diseños originales.
“Las manos tejedoras de la cultura milenaria de México se abren camino para mostrarle al mundo su manera de entenderlo a través de sus diseños y creaciones. Nunca más un ‘homenaje’ sin ellos”, indicó Frausto.