Un agente de la Policía Nacional del Perú (PNP) murió tras el ataque de una turba que quemó el vehículo patrulla en el que se encontraba.
Ocurrió en la región sureña de Puno. Allí el lunes fallecieron otras 17 personas en manifestaciones violentas, informaron este martes 10 de enero del 2023 fuentes oficiales.
El jefe del comando operativo de la PNP, Jorge Luis Angulo, confirmó el deceso.
Él detalló en declaraciones al Canal N que el agente estaba a bordo de un vehículo cuando lo “secuestraron y posteriormente asesinaron”. Su cuerpo quedó “totalmente calcinado”.
Agregó que “en estos momentos se está practicando la necropsia” del cuerpo para determinar la identidad de la víctima. Así como las causas de su muerte, mientras se investiga el caso junto con el Ministerio Público.
Angulo, quien especificó que hay cuatro miembros de la PNP en estado crítico por otros enfrentamientos con manifestantes, lamentó “los altos niveles de violencia” en Puno.
Así como los 17 fallecidos que dejó la violenta jornada del lunes, por lo que hizo un llamado a los ciudadanos a “no dejarse engañar” por los “azuzadores”.
Turba se lleva armas de patrullero
Sobre la muerte del agente en Puno se pronunció a primera hora de esta mañana el fiscal superior peruano Jorge Chávez Cotrina. Él es coordinador de las Fiscalías especializadas contra el crimen organizado.
“El policía ha sido asesinado, esa es la palabra, por una turba que ha incendiado el patrullero y quedó atrapado dentro y ha fallecido calcinado”, declaró Chávez, también en el Canal N.
El Canal N mostró posteriormente imágenes de una patrulla totalmente calcinada en una calle de Puno. Señaló que al interior se encontraban los restos del policía y que los atacantes, se apropiaron de dos pistolas y un fusil automático.
El Ministerio del Interior (Mininter) también confirmó luego que una turba “atacó e incendió un patrullero” durante la madrugada de este martes en la ciudad de Juliaca.
La unidad iba con dos policías a bordo. A ellos los agredió una turba que se apropió de sus armas e incendió luego el vehículo. Cerca se halló un cuerpo carbonizado que, hasta el momento, no ha sido plenamente identificado”, remarcó.
Agregó que el policía herido, al que identificó como el suboficial de tercera Ronald Villasante, que conducía la patrulla, “logró comunicarse telefónicamente con sus compañeros”, a quienes relató el ataque y denunció la desaparición de su compañero, el suboficial de segunda José Luis Soncco.
Villasante también confirmó “la sustracción de las municiones, chaleco antibalas y armas de reglamento que ambos llevaban (dos pistolas Pietro Beretta y un fusil AKM)”.
El suboficial indicó que unos 350 manifestantes los retuvieron y agredieron físicamente. Luego lo trasladaron a una clínica local “donde se le diagnosticó policontusiones y heridas múltiples en la cabeza, por lo que permanece en observación médica”.
“La Fiscalía viene trabajando conjuntamente con la Policía para identificar quiénes están detrás de estos hechos criminales”, reiteró Chávez.
Posteriormente indicó que una investigación compleja tiene un plazo de 18 meses, pero “obviamente” no van a esperar ese tiempo.
Los sucesos violentos en Perú
Al menos 17 manifestantes murieron el lunes en la ciudad puneña de Juliaca en las protestas alrededor del aeropuerto de la localidad.
Además de un bebé al que estaban trasladando a un centro médico y no pudo llegar por los bloqueos. Esto elevó a 46 la cifra de decesos desde el pasado 11 de diciembre en todo el país.
Los manifestantes exigen la renuncia de la presidenta Dina Boluarte. Así como el cierre del Congreso, la convocatoria de una asamblea constituyente y el adelanto de elecciones generales a 2023.
El primer ministro, Alberto Otárola, denunció, en ese sentido, que hay en marcha un “ataque organizado hacia el Estado de derecho y a las instituciones”. Y un “golpe de Estado”, del que ha responsabilizado a los manifestantes.
Otárola también dijo que el Gobierno anunciará en las próximas horas mayores medidas de seguridad en la región y que una delegación de alto nivel del Ejecutivo viajará este martes a Puno para buscar establecer un diálogo con los manifestantes.
El Gobierno de Puno, una región ubicada casi 1.300 kilómetros al sur de Lima, decretó este martes tres días de duelo en toda su jurisdicción por las muertes en Juliaca. que luego también se extendieron a saqueos y quema de locales públicos y privados en otras ciudades de la región, como Puno e Ilave. EFE