El Gobierno mexicano negó este jueves haber suspendido las labores de rescate de los 10 mineros que llevan más de una semana atrapados tras un derrumbe en una mina de carbón en Sabinas, en el norteño estado de Coahuila.
“Ayer un periódico, un medio de información, habló de que se habían detenido las labores de rescate, de muy mala fe. Entonces (vamos a) aclarar eso”, declaró el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Sus declaraciones se producen después de que medios de información nacionales citaron a familiares de los mineros y fuentes de dependencias de Gobierno que señalaron que se había suspendido la misión porque buzos encontraron áreas colapsadas.
Pero Laura Velázquez, coordinadora nacional de Protección Civil, afirmó que llevan “183 horas de trabajo ininterrumpido” desde que se reportó el derrumbe a las 13h35 (hora local) el 3 de agosto, cuando se inundó la mina de carbón en Sabinas por el colapso de un muro.
“Jamás se suspenden labores. Se trabajan las 24 horas del día y nuestro trabajo lo pueden testificar los propios familiares de los mineros. El trabajo que realizamos acá es continuo”, sostuvo la funcionaria en una videollamada desde el sitio.
La titular de Protección Civil había expresado el miércoles su confianza de “estar a horas” de que pudieran entrar los buzos rescatistas.
Sin embargo, aunque hubo cuatro descensos en uno de los pozos inundados que hay en la mina, no hubo condiciones para que se consumara el rescate, reconoció Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional (Sedena).
“No tienen espacio para avanzar, tienen obstrucciones, hay maderas, sigue habiendo ahí algunos polines (vigas), inclusive con las luces que llevan para poder observar en el interior no tienen la visibilidad que requieren”, indicó el jefe del Ejército.
Aún así, Velázquez afirmó que “no hay ningún riesgo de colapso”.
También expuso que han extraído 148.460 metros cúbicos de agua, por lo que en uno de los pozos están llegando “a niveles donde pueden entrar los rescatistas”.
“Esto lo estaremos evaluando en el transcurso del día, tenemos que ser muy cuidadosos para no exponer a nadie. Entendemos la urgencia de entrar y ojalá que el día de hoy pueda ser”, mencionó.
El derrumbe de la mina recuerda los trágicos accidentes que se han presentado en México en los últimos años.
De acuerdo con la Familia Pasta de Conchos, que agrupa a familiares de mineros fallecidos en el derrumbe de 2006 en la mina de ese nombre, también en Coahuila, se han registrado más de 100 muertes de personas dedicadas a la minería en esta zona de carbón desde entonces. EFE