El Inter de Milán aseguró el título de la Serie A de manera dramática, venciendo 2-1 a su eterno rival, el Milán, en el Derbi della Madonnina.
Esta victoria cobra un significado especial al lograrla con cinco fechas de anticipación y quedando a 18 puntos del Milán en la tabla.
A pesar de compartir estadio, los Rossoneros eran locales en este encuentro, contando con el apoyo de una mayoría de hinchas. Sin embargo, la consagración del Inter comenzó a tomar forma temprano en el partido gracias al gol de Francesco Acerbi a los 18 minutos. El defensa del Nerazzurro, tras un tiro de esquina, anotó el 1-0.
Aunque los locales intentaron reaccionar, la falta de contundencia en ataque les impidió igualar el marcador en la primera mitad.
El destino del partido quedó sellado a los 49 minutos, cuando Marcus Thuram marcó el 2-0 con una brillante jugada individual. Desde entonces, el Inter controló el juego, consciente de que el título estaba cerca.
El Inter tomó ventaja sobre el Milán
Al minuto 80 llegó el primer y único gol del Milán. Fikayo Tomori anotó en la portería de sus rivales y dio un leve suspenso al partido.
El final del encuentro estuvo marcado por la tensión, con expulsiones para Theo Hernández y Denzel Dumfries, así como para Davide Calabria en la última jugada del partido.
Con 86 puntos en la tabla y una diferencia de goles de +62, el Inter de Milan se destaca como el equipo más goleador y el menos goleado de la Serie A italiana. Además, su imbatibilidad como visitante y solo una derrota en toda la temporada confirman su dominio en la cancha.
Este título representa el vigésimo para el Inter de Milán, superando así a su eterno rival, el Milán. Con esta victoria, el Inter se ganará otra estrella en su camiseta para la próxima temporada, simbolizando su grandeza en el fútbol italiano.