Ansu Fati salió al rescate de un Barcelona que recupera vida en la Liga de Campeones con su doble triunfo por la mínima ante el Dinamo de Kiev, en la cuarta jornada que dejó la clasificación matemática a octavos con autoridad de Bayern Múnich y Juventus, la complicación del Sevilla con su derrota en casa ante el Lille y el paso al frente del Villarreal.
El regreso a lo grande de Ansu, tocado por los dioses del gol, dio una alegría en plena crisis de identidad de un Barcelona que recupera opciones en ‘Champions’. Con buena dosis de sufrimiento hasta el final, con Ter Stegen recuperando su mejor nivel para salvar a su equipo, temblando por la inestabilidad defensiva pero sacando oro del disparo arriba con potencia y rabia de Fati, que responde con personalidad al liderazgo heredado que exige el 10 que luce a su espalda tras el adiós de Leo Messi.
Todo vuelve a estar en la mano del Barça, que se jugará sus opciones de avanzar de ronda y evitar el descrédito de caer a la Europa League, ante el Benfica en el Camp Nou. Un triunfo le dará la clasificación matemática y evitar jugarse todo a una carta en el Allianz Arena ante un Bayern Múnich temible. Al ritmo goleador de un ‘matador’ insaciable. La jornada dejó otro recital rematador de Robert Lewandowski, autor de un triplete, y Cristiano Ronaldo, decisivo un día más para el Manchester United. Dos jugadores de leyenda.
Sus 81 goles en el centenar de partidos que cumplía Lewandowski, muestran el poderío del delantero polaco, que aún tuvo tiempo de fallar un penalti en la goleada del Bayern al Benfica (5-2), que le otorga no solo la clasificación a las primeras de cambio, también el primer puesto del Grupo E de manera virtual.
Promete emoción hasta el último suspiro el Grupo F, en el que el Villarreal cumplió ante el Young Boys, con tantos de Capoue y Danjuma en la Cerámica (2-0), para ser colíder junto a un Manchester United que se agarra a las emociones fuertes. De nuevo Cristiano y de nuevo en el último suspiro. Empató en el tiempo añadido del primer acto y del segundo al Atalanta (2-2), para alcanzar 139 goles, rey goleador de la competición de mayor prestigio a nivel de clubes.
Junto al Bayern, el segundo equipo que selló su pase de forma matemática a los octavos de final fue el Juventus, inundado de dudas en su liga y con poderío en ‘Champions’. Liderado por el argentino Dybala, autor de un doblete, pasó por encima del Zenit, 4-2, con tantos de Chiesa y Álvaro Morata a días de su regreso a la selección española para dos citas decisivas. El Chelsea, vigente campeón de Europa, acompañará a octavos en un grupo visto para sentencia tras su triunfo en casa del Malmö con un solitario tanto de Ziyech.
Sin red se queda el Sevilla, obligado a ganar en las dos últimas jornadas a Salzburgo y Wolfsburgo, para tener opciones de clasificarse tras igualar su peor racha en la Liga de Campeones. Dos derrotas y cuatro empates consecutivos, sin triunfos en cuatro jornadas, remontado en el Ramón Sánchez-Pizjuán por el Lille. De nada sirvió el oportunismo del argentino Lucas Ocampos. El canadiense Jonathan David de penalti al borde del descanso y el premio al gran partido de Jonahan Ikoné, dejaron sin respuesta al equipo de Julen Lopetegui, colista del Grupo G en una situación inesperada. Es líder el Salzburgo, que cayó en su visita al Wolfsburgo (2-1), para dejar a todos los equipos con opciones de clasificación.