Ecuador investiga un total de 87 casos de personas desaparecidas en enero pasado, informó este jueves la organización de derechos humanos INREDH.
Del 1 al 31 de enero de 2022 se registraron 598 denuncias de desaparición de personas a escala nacional, de las que 511 fueron localizadas, 16 de ellas sin vida, indicó con base en datos del Ministerio de Gobierno.
Las provincias costera de Guayas (cuya capital es Guayaquil) y la andina de Pichincha (con Quito, como capital) encabezan la lista con el mayor índice de desapariciones, señaló en un comunicado.
Del total de denuncias de desaparición de personas, “511 fueron localizadas y 87 aún se encuentran desaparecidas, y sus casos se encuentran en investigación previa”, señaló al anotar que 16 personas fueron localizadas sin vida.
Estos hechos, según el Ministerio de Gobierno, están relacionados con accidentes, suicidio, muerte natural y delitos contra la vida.
Además, 39 fueron desapariciones involuntarias vinculadas a accidentes, desastres naturales, menores de edad perdidos y personas con capacidades especiales y enfermedades.
Añadió que más de 400 fueron desapariciones voluntarias relacionadas con problemas académicos, familiares, sociales, económicos y psicológicos.
De las 87 desapariciones que aún siguen en investigación, el 62,1 % son mujeres y el 37,9 % hombres, indicó INREDH al detallar que el 64 % son de niñas, niños y adolescentes, el 31 % de personas adultas y el 5 % de adultas mayores.
“La desaparición de niñas, adolescentes, mujeres adultas y mujeres mayores es una forma de violencia contra la mujer”, anotó al recordar que Ecuador ha adoptado varios instrumentos para enfrentar esta problemática como la Convención Belém do Pará, instrumento internacional para prevención, sanción y erradicación de violencia contra la mujer.
A nivel interno, existe la Ley para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres, que en su artículo 6 señala: “El Estado es responsable de garantizar el derecho de las mujeres: niñas, adolescentes, mujeres adultas y mujeres mayores, a una vida libre de violencia”.
Sin embargo, la normativa existente “es insuficiente, ya que los derechos de las mujeres se siguen vulnerando tanto cuando es víctima directa e indirecta de desaparición, es decir, al momento de exigir verdad y justicia para sus seres queridos desaparecidos”, señala. EFE