Preparar unos deliciosos brownies en casa puede tomar unos 45 minutos. Se trata de un postre originado en Estados Unidos, pero que en la actualidad es el favorito de muchos alrededor del mundo.
Puntualmente, los brownies surgieron en 1893 en Chicago, durante la Exposición Mundial Colombina. Se atribuyen a Bertha Palmer, quien encargó a un chef del Palmer House Hotel un postre portátil para los asistentes, resultando en una versión original con nueces y sin polvo de hornear.
La receta evolucionó con el tiempo, incorporando variaciones como chocolate amargo y harina, según registros de la Biblioteca Pública de Chicago.
Descubre cómo preparar brownies en casa
Para una porción de 12 brownies se necesitan: 200 g de chocolate semiamargo, 150 g de mantequilla, 200 g de azúcar, 3 huevos, 100 g de harina de trigo, 1 cucharadita de vainilla y una pizca de sal.
Para iniciar, precalienta el horno a 180°C y forra un molde de 20×20 cm con papel para hornear. Derrite el chocolate y la mantequilla en un recipiente a baño maría durante 5 minutos, revolviendo hasta que estén homogéneos.
En un tazón aparte, bate el azúcar con los huevos y la vainilla por 2 minutos. Incorpora la mezcla de chocolate derretido y mezcla suavemente. Añade la harina y la sal, removiendo hasta integrar. Luego vierte la masa en el molde y hornea por 25 minutos o hasta que un palillo salga con migajas húmedas. Deja enfriar antes de cortar en cuadrados.
Variaciones y presentación
La receta permite añadir 100 gramos de nueces o chispas de chocolate a la masa antes de hornear. Una vez listos, corta los brownies en cuadrados de 5×5 cm para un servicio uniforme y sirve en platos planos para resaltar la textura.
Los brownies se pueden servir con helado de vainilla, crema batida o frutas frescas como fresas o frambuesas, según la preferencia. Para una opción caliente, acompáñalos con café negro o chocolate caliente, con una temperatura de servicio de 60°C.
Consejos para brownies perfectos
Usa chocolate de calidad con al menos 60% de cacao para un sabor auténtico. Mide los ingredientes con precisión usando tazas y balanzas. Es importante vigilar la cocción, para que no se quemen.
Por otra parte, puedes almacenar los brownies en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 5 días o en el refrigerador por 10 días. Para congelar, envuelve individualmente y conserva por 3 meses. Cuando quieras consumirlos debes recalentarlos a 150°C por 5 minutos.
El brownie, con su origen histórico y adaptaciones, sigue siendo una opción práctica y versátil en la repostería moderna. Sin duda, encantarás a tus seres queridos con esta preparación.