Así lo informó Connie Loor, quien ha sido la directora regional del INNFA. Loor aclaró que la entidad no desaparece, simplemente ha quedado sin vida jurídica de carácter privada, convirtiéndose en una institución pública, adscrita al Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), donde pasaría a absorber las funciones del programa de Operación Rescate Infantil (ORI) y del Fondo de Desarrollo Infantil (FODI). De esa manera, ha perdido una letra en su sigla, pero ha ganado competencias. Loor enfatizó que una primera fortaleza radica en lo económico, pues de los 90 millones de dólares anuales presupuestados para al entidad en un año, al aglutinar el de los otros entes, será de 200 millones de dólares. Asimismo, como INNFA no podía efectuar negociaciones internacionales por ser privada; no obstante, el INFA por su carácter de público sí, ya que del exterior prefieren tratos con el Estado. Otra fundamental competencia es que antes no podía generar políticas; mientras, en el decreto ejecutivo que crea a partir de hoy al INFA, le concede la potestad de ejecutar las políticas nacionales de desarrollo infantil, protección especial; participación y ejercicio de ciudadanía y apoyo a familias en situaciones de riesgo y emergencia.