Los representantes legales de Angélica y su madre argumentaron la demanda en la integración de ambas en el país, "los fuertes lazos entre la niña y su padre -que también reside en la capital belga de forma ilegal- y la escolarización" de la menor. Pero la semana pasada se supo que la Oficina de Extranjería no ha aceptado la petición, aunque todavía no se lo ha comunicado oficialmente, por lo que podrían ser expulsadas del país. La reclusión de las dos ecuatorianas en el centro para "sin papeles" provocó una gran polémica en Bélgica, así como cierta tensión diplomática con Ecuador. Sus abogados calcularon hoy que la tramitación de su recurso puede alargarse más de un año y confiaron en que, en ese tiempo, Angélica y su madre puedan beneficiarse de los nuevos criterios para la regularización de inmigrantes pactados por los partidos que, casi con total seguridad, formarán el próximo Gobierno belga.