Dado que es necesario comentar incidencias y más que nada las soluciones, respecto al constante peligro que vivimos de perder la dolarización que desde hace 19 años nos permite vivir sin el azote de la devaluación monetaria, y por la suerte de poseer muchos amigos, conocidos y/o relacionados que me estiman y corresponden el aprecio que les tengo, hoy, acogiendo sus públicos conceptos respecto a la dolarización y actual estado de nuestra economía, me referiré a una de ellos, la dama que, salvo mejores criterios, en su gestión hizo historia en nuestro Ecuador, ya que el Servicio de Rentas Internas-SRI actualmente es lo que es, aseguraría, se debe a que bajo su dirección desde 1998 hasta 2004, ella transformó el caótico ente que era, al que actualmente -sin llegar a la perfección- nos sirve siendo un efectivo y técnico recaudador de los tributos al Estado.
Dado que es necesario comentar incidencias y más que nada las soluciones, respecto al constante peligro que vivimos de perder la dolarización que desde hace 19 años nos permite vivir sin el azote de la devaluación monetaria, y por la suerte de poseer muchos amigos, conocidos y/o relacionados que me estiman y corresponden el aprecio que les tengo, hoy, acogiendo sus públicos conceptos respecto a la dolarización y actual estado de nuestra economía, me referiré a una de ellos, la dama que, salvo mejores criterios, en su gestión hizo historia en nuestro Ecuador, ya que el Servicio de Rentas Internas-SRI actualmente es lo que es, aseguraría, se debe a que bajo su dirección desde 1998 hasta 2004, ella transformó el caótico ente que era, al que actualmente -sin llegar a la perfección- nos sirve siendo un efectivo y técnico recaudador de los tributos al Estado.
Con ese buen antecedente que le da autoridad, esta talentosa economista conceptúa que el objetivo fundamental del gobierno actual debe ser el sostener y fortalecer la dolarización en la economía, siendo vital para ello que, aparte de no endeudarnos tal como en el “correato” sucedía, simultáneamente de una u otra forma, debemos sacrificarnos todos los ecuatorianos en la proporción y actividad que nos corresponda y de acuerdo a nuestras economías.
Ella conceptúa que hace falta firmeza en las decisiones gubernamentales, como sucedió en el intento de suprimir el subsidio a los combustibles, uno de los más demagógicos y que mucho afecta al erario nacional, lo que pone cada vez más en riesgo la permanencia de “San Dólar” como la moneda vigente; igual sucede con el obeso sector público, mismo que no tiene conciencia de lo grave que es la situación; igual, y como que no pasa nada, todos exigimos cada vez más, sin aportar un ápice de sacrificio.
Doña Elsa de Mena recuerda al presidente Clemente Yerovi Indaburu, quien a las demandas de sucres respondía simplemente “No hay señores, tienen razón pero no hay” y dice que igual debió suceder ante la reciente reacción de los distintos gremios, como el taxismo, ya que no hay dólares para subsidiar consumos que no sean específicos para servir a los más pobres; ellos se resisten al ingreso de nuevas tecnologías al respecto y amenazan con alteración de la paz; también estima dicha dama que el Estado debe ser más agresivo en el recorte de su campo de acción y su gran obesidad laboral, debiendo concienciar a todos los sectores sociales de la real situación que atravesamos.
Yo agrego a lo anterior, recordando que es bien conocido el contrabando de nuestros subsidiados combustibles, siendo vital ubicar a los que se enriquecen con tales ilegales manejos, quienes para continuar haciéndolo es que se inmiscuirían personalmente en la política y/o por medio de sus “burropiés”, aliados y padrinos. Continuaré comentando las posibles soluciones que ahora se conocen.
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