Actualizado hace: 937 días 12 horas 10 minutos
.jpg "Investigación pendiente y urgente")
Opinión
más noticias de Opinión
más noticias
Al fin se convenció Lenín II que la Refinería del Pacífico no va más, luego de haberse empeñado inútilmente durante 18 meses en buscar alrededor del mundo, interesados en este proyecto que a la corta y a la larga ha resultado ser una estafa más que se suma a la larga lista de corruptelas que perjudicaron al país en miles de millones de dólares durante la “década perdida” del gobierno de “Inocencio” Correa, el único mandatario que ha confesado ante el mundo que nunca se enteró, ni supo, ni vio que “por el ojo tuerto” estaban robando sus más cercanos colaboradores (la “banda rosa”) según se lo advirtió reiteradamente su propio hermano Fabricio.
Yo no me atrevo a culpar a Lenín II de no haberse convencido de lo ocurrido, incluso en tiempos en que él mismo formaba parte del gobierno anterior como vicepresidente.
¿Sabéis por qué, ah? Sencillamente porque los informes que estuvieron a cargo de Fiscalía, Contraloría, Procuraduría y de la caterva de asesores, auditores y fiscalizadores, sobre los cinco proyectos emblemáticos del correato, eran todos amañados, corrompidos y sobornados, conforme acaban de ser develados por auditorías técnicas internacionales confiables (de España y Reino Unido) con el aval del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Pero (el infaltable), como en esta vida nada es eterno, apareció (mejor tarde que nunca), Lenín II, sacrificando sus vacaciones navideñas en España, para presentar las denuncias respectivas ante los organismos competentes contra autores, cómplices y encubridores de los atracos que, según los primeros informes de los peritos, los cinco proyectos mencionados, costaron al país $ 4.821 millones con un sobreprecio de $ 2.083 millones.
Un resumen de la denuncia entregada a Contraloría y Fiscalía por el Presidente, señala que la repotenciación de la Refinería de Esmeraldas debió costar $750 millones, pero se pagó $2.230 millones. El aplanamiento del terreno y el acueducto para la Refinería del Pacífico debió costar $600 millones, pero se pagó $1.521 millones. El poliducto Pascuales-Cuenca debió costar $250 millones, pero se pagó $623 millones. La Terminal de Monteverde debió costar $201 millones, pero se pagó $371 millones. Y la Planta de Gas de Bajo Alto que tenía un costo inicial de $36 millones, terminó costando $76 millones.
El domingo próximo toparemos el tema pendiente y urgente: la delegación de Puerto Manta, denunciado en la Presidencia y Vicepresidencia de la República, y en el Consejo de Participación Ciudadana por el Comité Cívico Interinstitucional de Manta que preside Lucía I. (Continuará)
- ¿Qué te pareció la noticia?
- Buena
- Regular
- Mala
