Pese a que el camión en el que transportaban el alcaloide fue abierto en presencia de la prensa, los jefes policiales evitaron ahondar en detalles sobre el operativo, es decir la procedencia, destino y las pistas que llevaron a los investigadores a dar con el “narcocamión”.

“La información está a cargo de la Jefatura Nacional Antinarcóticos de Quito”, expresó una fuente de la Policía, agregando que en las próximas horas brindarán una rueda de prensa.

Seguidos . La noche del viernes, mientras elementos del Cuerpo de Bomberos de Portoviejo asistieron a los agentes policiales antidrogas para abrir el camión, tipo plataforma, trascendió que fue retenido en una zona montañosa  entre Bahía de Caráquez y San Clemente. 

Allí, los gendarmes de varios servicios como la Unidad de Investigaciones Antinarcóticos (UIAN) y el Grupo Especial Móvil Antinarcóticos (GEMA), procedieron a interceptar el camión, donde presuntamente iba escondida la droga.

Los detenidos, de nacionalidad ecuatoriana, se desplazaban en el automotor.

Normal. A simple vista no se apreciaba nada anormal en la carrocería del vehículo, similar al usado para transportar materiales de construcción.

Sin embargo, los investigadores policiales señalaron a los bomberos dónde emplear sus herramientas para cortar estructuras metálicas en casos de emergencias.

Ayuda. Los cortes en la carrocería arrancaron alrededor de las 22h00 y media hora después comenzaron a verse los resultados del trabajo. Se lograron descubrir las caletas o escondites de la droga.

En la base de la carrocería existía un doble fondo para el paso de los paquetes que estaban en el piso del vehículo.

Los paquetes tenían como distintivo el logotipo de una marca de vehículos.

Uno de los policías que participó en la redada mencionó que fueron más de 200 los bloques extraídos del vehículo y su valor sobrepasaría los $ 15 millones en el extranjero. 

El vehículo, al que se le hacía seguimiento desde hace 4 meses, quedó en el Comando de Policía.