Ahora han traspasado la línea fronteriza, pretendiendo sorprender al Gobierno nacional con sus letales costumbres, tratando de acorralarlo para manejar a su antojo el territorio, donde buscan establecer sus fundos demoníacos para continuar practicando sus negocios que aterrorizan y envenenan a las poblaciones.

Se pretende que, luego de la vil ejecución de la que fueran víctimas los tres integrantes del equipo periodístico de diario El Comercio, la recuperación de sus cuerpos pudiera ser posible a través de organismos internacionales humanitarios o de derechos humanos como la Cruz Roja.

Pero, supuesto comunicado del grupo criminal del alias “Guacho”, por ahora cierra esa posibilidad al condenar las actitudes de los gobiernos de Colombia y Ecuador, así como de Estados Unidos, a los que acusa de maniobras militares ofensivas.

Advierten de riesgos a quienes intenten hacer de mediadores para la devolución de los restos mortales.

En estas condiciones el Gobierno debe repensar los pasos a dar y Ecuador debe prepararse para una nueva confrontación con la delincuencia organizada en su más alta expresión del terror.