La gineco-obstetra María Marianita Tuárez explica que este cuadro es normal que se presente en mujeres embarazadas, ya que la misma condición predispone a la paciente a desarrollarla.

“Lo que sucede es que durante el embarazo la placenta, que conecta al bebé con el suministro de sangre, produce niveles altos de otras hormonas. Casi todas ellas inhiben la acción de la insulina en las células, lo que eleva el nivel de azúcar en sangre. Por ello es normal que haya un leve aumento del azúcar en sangre después de las comidas, y que las pacientes en espera sean propensas a adquirir la temida diabetes gestacional”, explica Tuárez.

Añade también que hay mujeres que tienen mayor riesgo de padecerla.

 

Perfil elegido. Entre las víctimas favoritas de las diabetes gestacional se encuentran las mujeres mayores de 20 años, las pacientes que tienen familiares que la han padecido, quienes tienen sobrepeso u obesidad, y las que tuvieron un embarazo con muerte fetal sin causa aparente.

 

Cómo afecta al bebé. Además, aunque investigadores no saben por qué algunas mujeres contraen diabetes gestacional, los resultados arrojados en embarazos han confirmado que esta sí puede causar problemas al niño.

La Clínica Mayo de Estados Unidos señaló que los bebés de madres con diabetes gestacional pueden nacer con sobrepeso, obesidad, y también puede provocar que  crezcan demasiado (macrosomía).

“Los bebés muy grandes —que pesan 9 libras (4 kg) o más— tienen más probabilidades de atorarse en el canal de parto, sufrir lesiones en el nacimiento o requerir un parto por cesárea”, explica la institución.

A veces los bebés de madres con diabetes gestacional también tienen un nivel bajo de azúcar en la sangre (hipoglucemia) poco después del nacimiento porque su propia producción de insulina es alta. Los episodios graves de hipoglucemia pueden provocar convulsiones en el bebé. 

 

Impacta a la madre. La diabetes gestacional también puede aumentar el riesgo de que la madre tenga presión arterial alta y preeclampsia (condición grave relacionada a la hipertensión).

Por otro lado, si una mujer embarazada adquiere en su primer embarazo la diabetes gestacional es probable  que la vuelva a padecer en un futuro embarazo.