Eduardo Cabrera, presidente del Comité de Padres de Familia de la Carmen Benalcázar, manifestó que el lunes protestaron con carteles porque desde la semana anterior les notificaron que sus representados debían avanzar hasta la unidad Ramón Zambrano a recibir sus estudios.

“La fusión es arbitraria”, “no firmamos actas de aceptación a fusión”, “queremos que la escuela siga aquí funcionando”, eran algunos de los mensajes que escribieron los padres de familia en carteles, dijo Cabrera.

Manifestó que por disposición de las autoridades llegarían buses escolares para transportar a sus alumnos, acción con la que no estuvieron de acuerdo, y además los buses tampoco llegaron.

Según el padre de familia, el proceso de reubicación estuvo viciado de irregularidades y ellos nunca firmaron un acta de aceptación de la fusión.

Aseguró que el tema tampoco fue compartido con los padres.

 

> distrito. Verónica Mejía, jefa distrital de Educación, manifestó que sí hubo acuerdos entre los padres de familia y el distrito, aunque eso fue con la administración anterior y no en la de ella, aclaró.

Indicó la funcionaria  que se quedarán recibiendo clases hasta que culmine este año escolar, pero para el 2018 ya deben trasladarse hasta la institución eje Ramón Zambrano.