Gissela Bello perdió la batalla. Ella murió el martes cerca de la medianoche luego de ser desconectada de los equipos médicos que la mantenían con vida.
Gissela llevó la peor parte del accidente. El resto de víctimas está fuera de peligro. La occisa deja una hija de cinco años de edad en la orfandad. Vivía en la parroquia Leonidas Proaño, de Montecristi.
Su cuerpo será velado en la funeraria Santa Marianita, ubicada en la avenida Flavio Reyes y la 25.