Ya es una costumbre que los rivales que llegan al Jocay salgan cabizbajos y ayer les tocó a Pablo Repetto y a su equipo, pues aunque hicieron un buen partido pesó más la efectividad de los locales, que derrotaron a los blancos por tercera ocasión en el año.

Liga (Q) ha sido uno de los rivales más difíciles que han llegado a Manta. Fue un equipo diferente en relación al último que llegó al Jocay y que salió derrotado por 4-1, dándole el título de la primera etapa a los mantenses.

Con este triunfo los manabitas sumaron 18 puntos y desplazaron del liderato al Deportivo Cuenca, que con el empate en Ambato ante Macará había llegado a 17 unidades.

Cuando ya se ha disputado casi el 70 por ciento del campeonato ecuatoriano, Delfín sigue imparable y es firme candidato a ganar la segunda etapa y ser campeón directo. 

Mientras tanto Liga (Q) se quedó con 9 unidades y en el octavo puesto en la segunda etapa. En la tabla acumulada los albos son décimos y los últimos puntos sumados por Clan Juvenil meten presión a los de Quito por el descenso.

El partido.  Liga llegó con una propuesta ofensiva bastante interesante.

Antes del minuto 10 había generado dos acciones de peligro que Juan Luis Anangonó no pudo concretar.

Anangonó fue el único delantero en punta de los visitantes y cuando fue asistido por José Francisco Cevallos o Jonathan Betancourt causó problemas a la zaga local.

Henry Cangá, el reemplazo del venezolano Jhon Chancellor, quien está en la selección de su país, no tuvo una buena tarde porque cometió algunos errores, sin embargo sus compañeros estuvieron atentos para corregir y se pudo mantener el arco en cero.

Delfín había iniciado el juego presionando alto a Liga y sin darle respiro, pero pronto los universitarios equilibraron las acciones.

A Jordan Sierra y a Jacob Murillo les costó hilvanar el juego para abastecer a Roberto ‘La Tuca’ Ordóñez, quien fue bien neutralizado por el zaguero de Liga Lucas De Lima.

De Lima ha sido tal vez uno de los pocos defensas que ha podido cerrarle los espacios a Ordóñez.

En el escenario se sintió un intenso calor, que mermó  de a ratos el accionar de los quiteños. La terna arbitral tuvo que dar un minuto para hidratación en cada tiempo.

La victoria. Fue precisamente en el minuto de hidratación del primer tiempo cuando el estratega cetáceo, Guillermo Sanguinetti, aprovechó para darles indicaciones a sus dirigidos y replantear el juego.

Es que Delfín había aprovechado poco el sector derecho. Por el sector izquierdo, Geovanny Nazareno y Jacob Murillo habían creado las mejores opciones, no así por el derecho, por donde corrían Marcos Cangá y Francisco Mera.

Justo después del minuto Mera y Cangá se juntaron, lo que terminó en un centro preciso de Cangá para que apareciera Murillo, quien con pierna zurda remató de primera para vencer el golero Leonel Nazareno a los 32 minutos.

Tras ser superado por su rival, en el segundo tiempo el técnico uruguayo de Liga, Pablo Repetto, ordenó el ingreso de Anderson Julio y el colombiano Sherman Cárdenas, esto para mejorar la creación de juego, sin embargo Delfín no permitió que los visitantes tomaran el control del balón.

La desesperación empezó a apoderarse del entrenador Repetto porque su equipo no reaccionaba y dispuso que entrara Johan Julio, que tampoco cambió el panorama para los universitarios, mermados por la fuerte temperatura.

Después Cárdenas tuvo una de las opciones más claras de Liga cuando se atrevió a disparar de media distancia, pero la pelota se fue desviada.

En Delfín también se notó cansancio. Sanguinetti sacó a Murillo, Sierra y Mera, e ingresó a Henry Patta, Bryan Oña y Carlos Garcés, quien volvió después de una lesión.

La dupla Garcés-Ordóñez volvió a dar peso ofensivo y los manabitas volvieron a adueñarse del balón y aprovechando la rapidez de Oña crearon jugadas que Garcés no pudo definir en dos ocasiones.

De las ocho fechas jugadas, Delfín ha sido puntero en cinco de ellas.