Bahía de Caráquez tiene actualmente una imagen diferente de lo que era antes de este fatídico sismo. Su apariencia es de una ciudad abandonada, ya que en ella ya no se nota ninguna de las actividades que la caracterizaban en las áreas comercial y turística.

Por sus playas y por las bellezas de los contornos con que la naturaleza la dotó, a más de la hospitalidad que se brindó siempre a los visitantes, Bahía de Caráquez se convirtió en el centro de una vasta región de atractivos turísticos, siendo ubicada en primeros lugares a nivel nacional e internacional.

Lamentablemente, ese terremoto del 16A se encargó de borrar en menos de un minuto esa situación que caracterizaba a Bahía de Caráquez. Y las consecuencias están a la vista de todos.

Existe una Junta de Reconstrucción creada oficialmente para atender a Manabí y Esmeraldas, pero la verdad es que poco se ha hecho por Bahía de Caráquez. No hay dudas que este organismo debió conformarse técnicamente con manabitas y con autonomía, sin intervención política. Todavía hay tiempo para que se apliquen las necesarias y convenientes reformas.

Hasta tanto, la ciudadanía ha recibido con optimismo y beneplácito general la conformación provisional de la Cámara de Turismo, integrada por personas representantes de las diversas actividades que han sido afectadas por el terremoto, que lleva como objetivo principal el mejorar la imagen de la ciudad y tratar de devolver la trascendencia que tuvo Bahía de Caráquez.

Es por esto y por mucho más que, haciéndonos eco del clamor ciudadano, insistimos en la necesidad urgente de la unión de los representantes institucionales, tanto públicos como privados, para que juntos se lleven adelante los planes que hagan posible esa real reconstrucción que consiga la necesaria reactivación económica.

Aprovechamos este comentario semanal para apoyar la iniciativa de los dirigentes barriales de Bahía de Caráquez y de Leonidas Plaza, que están llevando adelante la limpieza y el mejoramiento del ornato del cementerio general ubicado en Leonidas Plaza. Esta minga ciudadana tiene el respaldo de todos y es como una respuesta a lo que hemos venido insistiendo con relación a la atención que se debe dar a este lugar, que constituye la residencia final hacia donde iremos algún día.

Bien por estos ejemplos que brillan con luz propia y tratan de iluminar nuestro futuro.