Actualizado hace: 937 días 16 horas 14 minutos
Luto en la radio por la muerte de Fabricio Parrales

"Hoy nadie despertó con ánimo”, escribió el miércoles Andrea Salvatierra en Facebook.

Viernes 28 Abril 2017 | 04:00

Es que ese día fue distinto para los oyentes de Canela.  La radio no era la misma. El miércoles aquella emisora bullosa, alegre, carnavalera, parecía haber sido cambiada por otra. No llamaba a levantarse y trabajar con ánimo. En su cabina solo había llanto, dolor, luto.
Hasta las 7h30 nadie sabía por qué el programa “A filo de cama”, de Fabricio Parrales, no estaba al aire. Muchos, desde las cinco de la mañana, esperaban escuchar la voz del locutor arengando a despegarse de las colchas, a levantar ese “cuerpo vago”. En la radio solo sonaba la música de costumbre, merengues y cumbias, hasta pasadas las 8h00, cuando un locutor intervino para decir que Fabricio había fallecido en un accidente de tránsito. Viajaba en una moto y su cuerpo estaba en el hospital.
Desde entonces empezó una transmisión diferente.

LEA TAMBIÉN: Dolor por la muerte de Fabricio Parrales


La locutora colombiana María del Pilar transmitía a llanto vivo la muerte de su compañero. Sollozaba. Decía que había una tristeza grande en la cabina. Se le quebraba la voz,  lloraba. “Qué tristeza, Dios mío. Qué tristeza tener que contarles  esto”, dice a los oyentes.
Hubo un instante de silencio. Luego la mujer empezó a narrar cómo se enteró de la noticia. “Hoy me llamó mi jefe y me preguntó si Fabricio Parrales trabaja conmigo, le respondí que sí. Me dijo ‘váyase al hospital, un bombero me informó que ha sufrido un accidente’. Llamé a mis amigos y estuvimos en el hospital a las seis de la mañana. Cuando llegué estaba con vida en Cuidados Intensivos. A los cinco minutos salió un doctor y dijo que tuvo un paro cardiorrespiratorio y que era muy difícil que saga de esta. Nos tomamos de la mano y oramos. Dicen que se golpeó la cabeza, que no llevaba casco puesto. 20 minutos después sale nuevamente el médico y nos dice ‘hicimos lo que estaba en nuestras manos, pero el paciente ha muerto’. Todos nos abrazamos. A mí me quedaba la ira y la reflexión de no usar los cascos; su cuerpo no tenía ningún rasguño, yo lo vi, solo fue el golpe en la cabeza”.

ADEMÁS: El locutor Fabricio Parrales será sepultado este viernes


La locutora hizo una pausa, respiró y luego exclamó: “Esta canción va por ti, mi Fabri”. La voz de Alberto Cortez con su tema “A partir de mañana” empezó a sonar.
A esa hora, a las 09h00, Canela ya era sintonizada por taxistas y amas de casa que escuchaban la canción y reflexionaban sobre la vida y la muerte al son de “a partir de mañana empezaré a vivir la mitad de mi vida; a partir de mañana empezaré a morir la mitad de mi muerte”.
Cortez terminó de cantar y los locutores pidieron a los radioescuchas que llamen a la radio y digan cómo recuerdan a Fabricio. El teléfono sonó.  
“Hola, Canela, ¿con quién hablamos?”, dijo la locutora.
“Mi nombre es Johana Vinces. Muy consternada por lo que pasó. A las cinco la radio de mi casa ya estaba encendida para escucharlo; él animaba nuestras mañanas. Hoy es difícil decir buenos días, porque no tienen nada de buenos”.
Julián Chávez, otro oyente, llamó casi enseguida para decir  que estaba muy apenado. Contó que conocía al locutor porque siempre pasaba por su casa, en el barrio La Dolorosa, cuando iba a ver a un amigo. Ahora está arriba, animando en el cielo, expresó.
Al colgar la llamada se escuchó el llanto de los locutores.  

MÁS: Muerte de Fabricio Parrales deja consternación


Uno de ellos dijo que a Fabricio le gustaban los poemas. Admiraba a Medardo Ángel Silva, y le encantaba ese poema hecho canción llamado “El alma en los labios”.
Y lo tarareaba. A veces llegaba a la cabina haciendo rebotar la lengua en el paladar y solo se escuchaba el “tarararararaa taraaaararararaaa”.
Era romántico hasta más no poder, expresó uno de sus amigos, también locutor. “Ayer me preguntó ‘¿nunca has ido a la playa, has mirado el mar y has visto al sol ocultarse?’. Le dije que no, y él respondió ‘deberías ir, se siente una paz tremenda’”.  
Ring ring, sonó nuevamente el teléfono. “Hola, Canela, me ayudas con tu nombre”.
Las siguientes llamadas fueron de obreros, comerciantes, amas de casa, taxistas. Todos querían hablar al aire y darle el pésame a quien sea, a quien lo quisiera tomar.
REUNIÓN. En el transcurso de la mañana los taxistas se convocaron para pitar frente a la radio y demostrar que a ellos también les dolía la muerte de Fabricio.
A las 11h01 exactamente se escuchó un primer “piiiii, piiiiii”, y la locutora, la colombiana de la voz triste, empezó a agradecerles por el gesto: “Gracias a la fuerza amarilla por su apoyo, desde el cielo Fabricio los escucha”, dijo.
En ese instante el llanto se volvió intenso. Todos lloraban: DJ, locutores y técnicos.  Nadie podía continuar con la transmisión.
Abandonaron la cabina y salieron al patio para darse un abrazo, para ver a los taxistas que pitaron por al menos 15 minutos. La radio quedó en silencio por segundos y al programador de música solo le quedó poner al aire ese tema que dice “yo te extrañaré, tenlo por seguro”.
Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
  • ¿Qué te pareció la noticia?
  • Buena
  • Regular
  • Mala

Más noticias