Los tres estaban descansando en una cama cuando hubo un trueno seguido de un relámpago y se iluminó la habitación. Y luego de varios segundos hubo una explosión que causó la destrucción de un balcón, cuyos ladrillos cayeron sobre dos vehículos, explicó.
Este hecho se registró ayer a las 05h00 en el barrio San Agustín y García sospecha que un rayo originó la explosión debido a que estaba lloviendo en Manta.
García contó que se levanta a las 05h00 a calentar su carro para llevar a su hija a tomar el bus porque estudia en la UTM de Portoviejo y como no tuvo clases se quedó acostado, si no hubiera sido aplastado, dijo.