El gobierno equivocó cuando regresó al modelo proteccionista, tratando de apuntalar a una industria que en estos años ningún avance ha tenido. Precipita la crisis con las salvaguardias a pedido de los industriales en desmedro de los comerciantes. Esta medida trajo mucho desempleo. Bajo el signo de la abundancia repudió las reservas y gastó lo que tenia para “avanzar”; y cuando las vacas enflaquecieron no había alimento para engordarlas, vivimos del fío. Se retira dejando al país en la incertidumbre con el candidato de la AP que no da señales de cambio sino buena voluntad para escuchar; y su binomio que asegura inefabilidad. Se trataría de una misma visión con diferente titular que dice estar dispuesto a conversar y gobernar para todos, pero el problema no radica en su afable personalidad sino en sus ideas, porque las expuestas precipitan la crisis. 

La crisis de 1982 llevó a la fractura de grandes empresas y a todo el sistema financiero nacional. El Estado asumió la deuda dólares y para viabilizar el mecanismo estableció lo que se llamo “sucretización”, que la heredó León  Febres – Cordero, quien sacó a la banca de la quiebra sin que el público lo percibiera.  

En 1995 la mayoría de las sociedades financieras fracasaron junto al Banco Continental. Un club de pequeños deudores que sumaban $600 millones se había conformado. Sumado a la corriente del Niño de 1997, el Congreso Nacional de conformidad con el presidente Jamil Mahuad dicta la ley conocida como de la AGD, la cual resultó insuficiente.  

El país soportó la dificultad de 1995, pero frente al desastre natural y golpes de Estado no tomó las medidas correspondientes Ej: la dolarización anunciada 3 años antes por Bucaram, por eso devino la tragedia con su secuela de llanto y dolor.  

Visto las cosas así, les digo que no podemos darnos el lujo de equivocarnos. Tal como en 1984 escogimos un presidente con determinación e inteligencia, en este 2017 debemos proceder semejantes.  

Si queremos cambiar, primero vencer; y para conseguirlo hay que votar por aquel que hasta ahora va en un constante segundo puesto, como es Guillermo Lasso Mendoza; mas si en la recta final de  haber cambio, sin la menor duda votaré por aquel/lla que ahí se ubique. 

Proceda igual, su voto hace la diferencia, vote útil.