Años atrás, el aire de nuestras ciudades era limpio, puro, ideal para que los seres humanos y los animales lo respiraran. Ahora el aire está tan contaminado que en muchos lugares no es seguro ¡ni siquiera respirar!
Todo comenzó cuando las personas comenzaron a construir fábricas y a producir automóviles, ya que estos despiden una gran cantidad de gases dañinos para el medio ambiente.
En muchos países del mundo el aire se encuentra tan lleno de contaminación que lo llaman smog: una mezcla entre humo y niebla que intoxica el aire.
Observa
Tómate un minuto para observar el cielo en tu ciudad, si está gris y oscuro es porque está cubierto por smog. En cambio, si está claro y azul debes sentirte feliz porque el aire está bastante limpio.
El aire contaminado no es solamente malo para la gente y los animales, también es dañino para los árboles y otras plantas. En algunos lugares la contaminación perjudica hasta los cultivos y los alimentos que comemos.
Es importante que nosotros limpiemos el aire, plantando árboles y utilizando nuestra bicicleta en vez de viajar en auto. ¡Luchemos por el aire limpio!