La firma continúa expandiendo las posibilidades del casco HoloLens, aún en proyecto. Lo hizo por primera vez durante la anterior edición del congreso para desarrolladores Build y este año ha querido ir un poco más allá mostrando algunas de sus virtudes.
Esta tecnología viene a suplir algunas carencias existentes en el mercado y a allanar el terreno sobre otras nuevas experiencias y usos que vendrán en el futuro.

CARACTERÍSTICAS. Todos recordaremos como último hito en la realidad aumentada las gafas de Google Glass, pero Microsoft ha dado un verdadero salto tecnológico.
Una de las grandes diferencias de HoloLens respecto a cualquier visor de realidad virtual es que son totalmente independientes, es decir, no necesitan estar conectadas a un ordenador para poder funcionar.
Las gafas de Microsoft llevan incorporado en su interior todo un ordenador, equivalente a un portátil de alta gama. Gracias a ese hecho de que no necesitan estar conectadas se les confiere una gran libertad de movimiento y comodidad en una época en la que el inalámbrico se debería dar por sentado.
Además, este dispositivo para la cabeza, a diferencia de las gafas de Google, no está destinado a llevarse todo el tiempo puesto, sino que tiene un propósito concreto.
Las HoloLens son capaces de ‘mapear’ las superficies alrededor del usuario. Desde el mobiliario hasta las paredes. De esa manera los hologramas pueden interactuar con el entorno.
Otro aspecto a destacar de este dispositivo, cuyo kit para desarrolladores tiene un costo de 3.000 dólares y su lanzamiento podría llegar en un par de años, es en lo relativo al sonido que genera gracias a un sistema de audio estéreo en 3D. Probablemente sea uno de los aspectos mejor logrados de las HoloLens. Da la sensación de venir desde donde se encuentra el holograma, haciendo que la experiencia sea más inmersiva.
Hay una característica que ha decepcionado a los que han probado estas gafas.  La queja gira en torno a que el rectángulo que ocupa la pantalla donde se proyectan las imágenes es demasiado pequeño. Sería algo así como ver una pantalla de 15 pulgadas a dos metros de distancia.
El portal de la ABC da unas especificaciones sobre la diferencia entre realidad virtual y realidad aumentada. “La realidad virtual tiene un claro uso en juegos y contenido multimedia, la realidad aumentada parece estar más enfocada en un uso práctico y profesional”, indica el portal web.