Desde esa época el ministro, el periodista Freddy Ehlers, viaja por el mundo hablando de felicidad. Según su página web, ha ido a unos diez países en los últimos dos años. Francia, Italia, México, Colombia, Perú, Bolivia, España, Turquía -expuso como vocero de la cumbre para el desarrollo humano- y otros.

El ministro contrató la producción de 63 episodios para los dos programas de televisión que tiene en el canal público, elaboración de reportajes, y para la cobertura de eventos nacionales e internacionales.

Los contratistas son sus excolaboradores -con quienes compartió en el programa La Televisión-, y el monto fue más de 600 mil dólares. Los contratistas fueron los mismos que usó el ministerio de Turismo cuando Ehlers estuvo en esa cartera de Estado, según publicó Teleamazonas.

Seguramente se ha logrado el objetivo de la felicidad, pero entre los beneficiados de estos contratos.

En un país donde ya no hay bonanza petrolera y la crisis ronda a todos los sectores, ese ministerio, sigue. Críticas no le han faltado, pero el gobierno mantiene su ministerio de la Felicidad para, seguramente, no hacer felices a los que critican que Ehlers siga allí cobrando más de 5 mil dólares mensuales, y con rango de ministro. 

Para muchos este tipo de ministerios son gastos del recurso público. Bien podría el país ahorrarse millones de dólares si eliminara tanta burocracia o al menos revisara en cada ministerio los puestos de empleados y asesores que están de más.

Desde hace más de seis meses varios economistas han advertido al gobierno de la crisis que se vive en Ecuador, han pedido reducción del gasto público, y aún así no se eliminan este tipo de ministerios que sirven para hacer felices a unos pocos, y que lo peor sus resultados no son medibles.

Ese ministerio tiene 12 millones de dólares asignados hasta el 2017, unos tres millones anuales. Laboran allí 38 personas. Creo que es mejor crear un ministerio de la austeridad o de la eficiencia para comenzar a administrar mejor el dinero público.

Cómo es posible que Ecuador tenga más ministerios que ningún otros país de Sudamérica, incluso por encima de Brasil, que en territorio, número de habitantes (más de 200 millones de habitantes) y en PIB (Producto Interno Bruto) es sumamente más grande.

Desde septiembre del 2015, cuando se anunció que el gobierno iba a reducir ministerios y gastos, muchos ecuatorianos seguimos preguntado: ¿cuándo es el día que se toma en serio la crisis que hay y se comienza a evitar gastos innecesarios?