Spears, de 25 años, se refiere en su mensaje a varios temas como su ingreso en el centro de rehabilitación "Promises" de Malibú, las presiones bajo las que se encuentra, su análisis de la vida y la "bendición" de tener hijos. "Recientemente fui enviada a un sitio humillante llamado rehabilitación. Había tocado fondo. Hasta el día de hoy no creo que la razón fuera el alcohol o una depresión. Me parecía a un niño malo corriendo por ahí con un desorden de déficit de atención", explica la artista. A su vez, señala que se dio cuenta de "cuanta energía y amor había puesto en mi relación pasada (su matrimonio con Kevin Federline) cuando se acabó porque literalmente no sabía que hacer conmigo misma, y eso me entristeció. Confieso que estaba perdida". "Esta carta no es para acusar a nadie, aunque ahora sí que veo el mundo de otra manera. Haber estado en esa condición tan vulnerable y ver cómo me llevaban a cenas y fiestas con amigos y darme cuenta luego de que yo lo había pagado todo me sirvió para aprender mucho. Creo que el problema fue dejar entrar a demasiada gente en mi vida", escribe la artista. Spears se separó de Federline en 2006 tras dos años de matrimonio y dos hijos en común. Ahora, explica la cantante, "me veo obligada a enfrentarme a muchas cosas desde que tengo hijos. Muchas de las inseguridades que tenía cuando eran pequeña me resurgen ahora. Es como si uno nunca fuera lo suficientemente bueno". "Sé que todo el mundo cree que juego a ser víctima pero no lo soy", relata la artista, que también opina que "igual" la razón para escribir a sus seguidores es la de permitir a la gente que la vea de forma distinta. En relación a su reciente comportamiento, cuando no cesó de asistir día tras día a las fiestas, indica que es "normal para una chica joven salir tras un gran divorcio. Creo que se armó un gran follón porque no había salido en mucho tiempo. Tengo 25 años y tengo mucho que aprender y cometeré errores que saldrán en la CNN o en el espacio 'Good Morning America'". "Soy humana y los quiero por seguir queriéndome", explica Spears. Por último, se refiere a su hijos y dice que se siente "verdaderamente bendecida por tenerlos en su vida. Cada día es surrealista. La vida en general es surrealista y loca". "Espero que esta carta haya hecho que piensen un poco en mí y de dónde vengo. Quiero las mismas cosas que ustedes de la vida, entre ellas las de ser felices. Es raro porque cada uno tiene su propia percepción de mi y de cómo piensan que soy", agrega. Tras salir de rehabilitación, Spears ha continuado con la grabación de su nuevo disco y ha ofrecido algunos conciertos, en los que según algunos críticos no ha cantado en directo. La famosa cantante, de 25 años y madre de dos hijos, se convirtió a principios de año en protagonista de la prensa del corazón por razones personales, entre ellas su divorcio del cantante y bailarín Federline, sus fotos sin ropa interior o su corte de pelo.