Anabel Vivanco, especialista en medicina familiar, señala que las personas pueden ser portadores de este virus mediante tres formas de contagio: transmisión sexual, sanguínea y perinatal (relativo al nacimiento).

Por ello destaca que es importante realizarse exámenes de laboratorio específicos para saber si son portadores del virus o no.

“La prueba del VIH es instantánea. Simplemente  se prepara al paciente, se limpia el dedo con soluciones antisépticas, se pincha con una lanceta, se obtienen dos gotitas de sangre, se ponen en la muestra y se aplica un reactivo”, dice Vivanco al expresar que el resultado de la prueba se lo obtiene en dos o tres minutos. 

Ella destaca que cuando un paciente tiene VIH, “inmediatamente tenemos que coordinar con la atención secundaria, que es a nivel hospitalaria, porque se necesita una serie de seguimientos”.

 

> Cómo prevenirlo. La única manera de prevenir la transmisión del VIH en las relaciones sexuales es usando correctamente el preservativo, según la profesional. 

Además, la infección por transmisión sanguínea se previene evitando compartir equipos de inyección, canutos u otros instrumentos cortantes o que pinchen (como los que se utilizan para realizar tatuajes que no estén esterilizados). 

Es importante que la mujer embarazada y su pareja usen preservativo y realicen el test de VIH e ITS (infección de transmisión sexual) en el embarazo, ya que de esta manera se previene la posibilidad de transmisión al bebé que está por nacer.  

Cuando una mujer en estado de gestación tiene VIH-sida, el virus puede pasar a su bebé en tres momentos: durante el embarazo, en el parto y mientras le da el pecho.