Arnaud Winter, perfumista de Yanbal que visita Manabí, dice que para elegir una fragancia debes al menos probar dos o tres perfumes. 

Lo correcto es colocar un poco del perfume en tu muñeca y dejar que se evapore por unos 20 a 30 segundos. Luego puedes oler y analizar el aroma. 

“Si la fragancia se compacta contigo, entonces es la ideal para ti”, explica Winter.

Si quieres probar una siguiente fragancia espera un momento o aplica canela o café para que se vaya el aroma y coloca el otro perfume. 

También debes tener en cuenta las zonas del cuerpo donde ubicas la fragancia. 

Hay quienes lo hacen en el mismo lugar, pero lo ideal es hacerlo en aquellos donde perdure más tiempo. Winter recomienda las muñecas, detrás de las orejas, en el busto y otros sitios de movimiento o donde haya más irrigación sanguínea, como el cuello, de esta manera hay una mejor difusión y durabilidad de la fragancia. 

RECOMIENDAN. Eva Delgado, asesora de Aromas y Recuerdos, dice que el asesoramiento es importante cuando de elegir una nueva fragancia se trata. 

Delgado explica que hay maneras de recomendar un perfume y cuando no se tiene una preferencia definida del aroma se realizan dos preguntas claves: ¿qué fragancias ha usado recientemente? y ¿qué le gusta de esas fragancias? 

Una vez que se conoce hacia dónde se inclina la persona, se procede a recomendar las opciones.

En caso de que ella quiera cambiar la fragancia que usa, se debe indagar preguntando sobre qué razones la llevan a cambiar de perfume y cómo describiría su fragancia ideal.

Delgado coincide en que al cliente se le deben presentar hasta tres opciones para que elija la más acertada y la que se acerca más a su forma de ser.