El exvicepresidente planteó una solución, la cual comprende la emisión de un timbre cambiario, o “dólar de importación”, que permitiría flexibilizar el tipo de cambio para los sectores exportador e importador, que se obtendría a través de subasta. 

Según Dahik, esto haría que el sector de exportación reciba un beneficio de este costo más alto. Al eliminarse la salvaguarda y el 5 % a la repatriación de capitales, obtendríamos que esos recursos vayan al sector exportador y se estimule la generación de divisas, indicó.

Otra propuesta que hizo es que el Estado también pague ese timbre para que refleje en su contabilidad y entienda el valor real de las divisas y no esté estimulado a sobreimportar o gastar demasiado. Todo esto tiene que enmarcarse en el ajuste del gasto público, que es el principal problema que ha generado la situación actual. 

Leyes. Sobre el tema de la plusvalía, el exvicepresidente de la República dijo que es más complejo. Del gran universo de propiedades, es cierto que en algunos lugares puede haber una obra pública que genere un valor adicional; para ese tipo de situaciones existe la contribución de mejoras, manifestó.

Agregó que en cualquier país del mundo invertir el 45 % del PIB en gasto público es un exceso.

Las declaraciones de  Alberto Dahik fueron brindadas al diario guayaquileño El Universo.