Ante ello, los ciudadanos estamos preocupados con lo que pasa en ese país hermano, tomando en cuenta además que hace no mucho tiempo hubo también enfrentamientos de la población contra ese gobierno “bolivariano” y en que se hizo presente la violencia para reprimir esas manifestaciones y la prisión de que fue objeto un alto dirigente político que aún continúa privado de su libertad a lo que se suma recientemente la captura del alcalde de Caracas. 

La verdad es que el gobierno del señor Maduro debe actuar con tolerancia, pues esta virtud, el diálogo y el respeto a la opinión ajena son factores básicos para una buena convivencia civilizada para que se articule lo mejor del pensamiento de quienes conforman un país para enrumbarle de modo óptimo. 

Bernard Show, famoso dramaturgo, sostuvo que “todo progreso estriba en la tolerancia”. Sería bueno que tanto el régimen venezolano como “otritos” de nuestra región, y en especial los más autoritarios del mundo, sigan este modesto, pero muy útil modo de conducirse y ser más flexibles. 

Imponer un modelo ya rancio a la fuerza es crueldad y total antidemocracia.