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Guido Zambrano
A la universidad la salvamos nosotros

Martes 26 Mayo 2015 | 05:00

La universidad Laica Eloy Alfaro de Manabi, ULEAM, ha entrado a un proceso de intervención por el organismo máximo, el CES, con el objetivo de tomar correctivos iniciales y crear las condiciones para realizar elecciones democráticas del claustro universitario y comience una nueva etapa que reestructure, fortalezca y proyecte a la universidad para cumplir cabalmente la misión  científica de investigación y de formar los nuevos cuadros, élite de la provincia, y  salir de la cierta inercia y avasallamiento que la provincia padece, de la que todos somos responsables ante el juego de intereses que conspiran contra Manabí.

El interventor designado, Stalin Santacruz, quiteño, ético y con solida formación académica, pero con poco conocimiento de la realidad interna de la universidad y mentalidad manabita, ha caído al parecer en ingenuidades que defraudarían la esperanza principalmente de los jóvenes estudiantes, que aspiran que se limpien practicas dolosas y se cese a ciertos funcionarios que con fondos públicos y deshonestidad querían llegar a ser autoridades en las elecciones que se habían convocado.
Hay en estos días decisiones que se han tomado y que pudieran no tener consistencia por vacíos legales, ilegalidades, como es la designación de una rectora encargada, que ya ha comenzado a tener cuestionamientos; y ello llevaría a postergar el verdadero objetivo y necesidad de la universidad, que es de salir de la categoría E con que fue evaluada, y que evidenciaba la crisis institucional que existe en la ULEAM.
Es necesario que todos los manabitas tomemos conciencia de la gran importancia que tiene la universidad para el presente y porvenir de la provincia. Si no  solidificamos científica y éticamente a la universidad, se seguirá postergando el ganar respeto, valía y prestigio de la provincia en el contexto nacional. Es desconsolador que la tercera provincia del país casi no tiene voz y representación prestigiada en los centros de decisiones.
Nuestra universidad que lleva el nombre del más ilustre de los ecuatorianos, Eloy Alfaro, sirve casi al 65 % de la oferta universitaria provincial. Tiene extensiones  en varios cantones y recibe el segundo rublo de aportes estatales, después de la prefectura. 
Hay ilustres manabitas que han salido de sus aulas, pero es muy cierto que desde hace rato perdió la senda de la búsqueda de la grandeza, excelencia y trascendencia.
Uno de los precandidatos a rector recibió de los estudiantes una camisita que tenia estampado el lema: “La universidad la salvamos nosotros”. 
Con esa consigna que es vigente en la actualidad, hacemos votos de que no solo sean los jóvenes de la ULEAM los que peleen por su universidad, sino que todos los sectores, grupos, lideres, se unan en un solo frente para pedir a los órganos correspondientes de que se limpie y reestructure a fondo la ULEAM, porque de ello depende el presente y futuro de la provincia del milenio.
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