Los representantes de los taxistas solicitan que el nuevo valor de arrancada sea 60 centavos, que el kilómetro recorrido cueste 50 centavos y que el minuto de espera sea de 12 centavos. Así mismo, la dirigencia de los buses pide que la nueva tarifa para adultos sea de 40 centavos, respetando el 50% de rebaja a los estudiantes, discapacitados y personas de la tercera edad.

En la última reunión varios ciudadanos expresaron que amerita la revisión de los pasajes, pero pusieron reparos en el trato de los colaboradores de los buses, especialmente con los niños y adultos mayores. Ante esa situación se reiteró la propuesta de Henry Marcillo, de crear una veeduría ciudadana que vigile el servicio del transporte.