La entidad informó que los técnicos se trasladaron a la playa desde el primer día en que ciudadanos alertaron sobre la presencia de un lobo marino (no es foca) y agregaron que el mamífero, que se encontraba descansando en el área rocosa, no presentaba heridas externas y ante la presencia de los técnicos realizó movimientos rápidos y retornó al mar.

 

Se pudo evidenciar que mientras se sumergía entre las aguas sus movimientos eran normales.

Los técnicos solicitaron a la ciudadanía colaboración evitando el acercamiento humano y de cualquier animal doméstico (perros) que atente contra la tranquilidad del lobo marino que se encuentra en el área rocosa descansando. 

Indicaron que llegan todos los años a diferentes playas de Manabí.