El empate a uno dejó sensaciones diferentes que quedaron para el análisis de los técnicos Gustavo Quinteros y Rubén Israel, de Emelec y Barcelona, respectivamente.
El volante Osbaldo Lastra realizó un trabajo silencioso durante este encuentro, pero ante las estadísticas, se ve que el “eléctrico” fue mejor pasador y quitador de balones.
En zona de gestación, los jugadores “azules” tenían mayor volumen de juego e interrumpían el accionar “torero”, que a pesar de retener más tiempo el esférico no eran tan claros a la hora de arribar al área contraria.
Sin embargo, en una de sus pocas llegadas, el delantero Ismael Blanco marcó de cabeza. Barcelona, con un 71% de efectividad (llegadas) en el arco rival, fue más que Emelec, que llegó al 50%.
A pesar de que el “Bombillo” dominó el ritmo del partido, no pudo concretar las oportunidades que se le presentaron.
”Ley manabita”. Ya el análisis de la final de ida quedó para los registros. Emelec y Barcelona se preparan para la gran final de este domingo a las 16h30 en el estadio Banco del Pacífico (Capwell), donde se conocerá al campeón 2014.
La ley para este compromiso será manabita, debido a que el árbitro Carlos Vera pitará el último cotejo de la temporada. Vera ha tenido un gran año en su carrera. Estuvo presente en la final del Mundial de Brasil 2014 como cuarto árbitro y ahora pitará el duelo más importante del año: la final, con el ingrediente de que es un Clásico del Astillero.