La prensa reveló una serie de fotos y ‘selfies’ de la enfermera italiana Daniela Poggiali, sospechosa de haber matado a 38 pacientes. En la mayoría de las imágenes la mujer posa sonriente al lado de lo que parecen cadáveres. Poggiali, de 42 años, fue detenida después de la muerte inesperada de una anciana que no sufría ninguna enfermedad grave.