“Tenemos 30 años y falta todo por hacer”, prosigue. Él es habitante de la ciudadela El Paraíso, ubicada en el kilómetro cinco de la vía a Quito.

El hombre comenta que la única obra que han recibido es el asafalto de la vía Las Palmas, principal arteria del lugar.

“Las autoridades nos toman como fuente de apoyo en las elecciones para ocupar un curul, pero no hacen nada”, manifiesta.

Según cuenta, El Paraíso se conformó mediante un proyecto viviendístico, parte de la propuesta del expresidente León Febres Cordero “Pan techo y empleo”, frase que usaba como slogan de su campaña política.

“Esto empezó en 1988 como un proyecto con el Banco de la Vivienda, que pretendía construir 1.200 soluciones habitacionales, pero fueron abandonadas porque el banco remató”, relata León, uno de los dirigentes del sector.

Agrega que sólo se levantaron 400 casas a medias que con el pasar del tiempo fueron adecuadas por los propietarios.

Para no quedar solos y aislados invitaron a las personas a poblar la zona, así empezaron las invasiones.

La mayoría de los moradores coinciden en que las necesidades más urgentes son el arreglo de las calles y alcantarillado. 

La escuela de la zona no tiene estatutos, el Subcentro de Salud lo construyeron gracias a la gestión del colectivo, que tuvo que adueñarse del lote.

Destacan que la seguridad mejoró a medias con la cámara del ECU 911 colocada en la avenida principal.

Esperan ser escuchados por las autoridades cantonales.