Él es sargento segundo en servicio pasivo y fue uno de los pioneros en el paracaidismo ecuatoriano, además figura como el primer comando del país.
Vargas asegura ser un militar “hasta los huesos”.
A sus 18 años ingresó al acuartelamiento .
Dos años después pasó a formar parte del Ejército.
El curso de paracaidismo lo realizó en Quito.
Vargas recibió un homenaje este miércoles, Día del Paracaidismo Ecuatoriano.
Mauricio Espín, comandante del Batallón Montúfar, dijo que era un orgullo para ellos brindar un homenaje a Vargas, quien es oriundo de Santo Domingo.
“Los homenajes se hacen en vida, por ello este día hemos rendido nuestro respeto a un pionero del paracaidismo”, sostuvo.
David Vargas, hijo del homenajeado, se llena de emoción cuando habla de su padre.
“Me siento muy orgulloso, al igual que mi familia. Mi padre dio vida y corazón al Ejército. Es un ejemplo a seguir”, indicó.