Sin embargo la voluntad de servicio, el sentido de administración, los conocimientos de la realidad de nuestro cantón y el gran amor a nuestra ciudad, son los  ingredientes necesarios para sacar a Portoviejo adelante.

Esto sin dejar de lado, claro está,  la coordinación que debe haber entre todos los portovejenses que están al frente de las instituciones del Estado y el apoyo incondicional del pueblo para soportar las molestias de los cambios. 

Y que hay que comprender que es necesario el sacrificio de unos días de inconformidades  y  disgustos para poder ordenar el caos que existe y que no nos permite progresar.

El Alcalde a través de las redes sociales y de sus entrevistas ha solicitado ideas y sugerencias a quienes quieran aportar con el bienestar del cantón para lograr que su administración sea un éxito; idea que felicito y que muchos estaremos dispuestos  a entregar todo de nosotros para lograr ese Portoviejo que tanto soñamos.

Hemos puesto nuestra esperanza en un nuevo personaje, que en mi opinión tiene más de administrador que de político,  que está dando muestras de renovar y mejorar el entorno de la ciudad.

Por ello mis líneas, Sr. Alcalde, primero para decirle que desde donde esté cuente con esta ciudadana amante de Portoviejo y soñadora como la que más por el cambio que debe hacerse en la ciudad; y segundo para apelar a su sabiduría y conocimiento de nuestra realidad para que cualesquiera que sean sus decisiones, siempre vayan direccionadas a crear un orden.

Orden que debe ser realizado con pinzas para alcanzar el equilibrio entre el desarrollo de la ciudad con la problemática socio – económica de nuestra gente, porque es necesario crear la conciencia ciudadana para el logro de los objetivos.

Las obras que Portoviejo requiere deberán enfocarse siempre hacia el buen vivir de los portovejenses.

Desde planificar sus espacios, rescatar y engalanar sus rincones y paisajes, ejecutar obras hasta organizar la ciudad; porque debemos hacer de Portoviejo un sueño y de ese sueño una realidad. 

Cómo no soñar con un malecón del río Portoviejo desde Colón hasta Picoazá; a partir del cual podremos atraer el turismo.

Solucionar el ordenamiento de los comerciantes y sobre todo recuperar nuestra identidad embelleciendo nuestro río Portoviejo. 

Como ingeniero eléctrico me sumo al proyecto de transformación de las redes eléctricas.

Es hora de coordinar con la empresa eléctrica  e iniciar la regeneración urbana que incluya el cambio de los “tallarines”, que tan mal aspecto dan a la ciudad,  por las redes subterráneas.

Estoy segura que aplicará este criterio: “Liderazgo es hacer las cosas, pero Gestión es hacer las cosas bien“.