La moradora contó que el aljibe luce vacío y que su ropa no ha sido lavada totalmente. “Es que hace más de un mes estamos padeciendo por el servicio de agua potable, algo que antes no ocurría”, señaló Zambrano. 

Ella no quiso ser la única testigo de la escasez que sufre este sector, por lo que buscó a dos vecinas para que hablen del tema. 

María Eugenia Pico aseguró que por cuatro ocasiones ha llamado a la Empresa Pública Aguas de Manta (EPAM) para buscar respuesta al problema, pero sólo ha recibido promesas. 

“Dicen que ya nos enviarán agua, que solucionarán el problema, pero seguimos igual”, cuestionó la moradora Frellia Aizprúa.  

En la ciudadela Divino Niño 2 también hay escasez del líquido, señaló Alberto Pazmiño. En las últimas dos semanas él se ha abastecido por tanqueros.

Propuesta.  Divino Niño 1 y 2, ciudadela Costa Azul, Villamarina, urbanización San José, barrio 9 de Mayo y el sector Mar y Cielo también sufren la escasez.   

Wilson Salvatierra, habitante de Costa Azul, explicó que hay ocasiones en que el agua se va hasta por una semana. Esto último lo confirmó Beatriz Palacios, moradora de Villamarina. Luego de cinco días el líquido vital llegó el jueves a su vivienda, pero escasa. De 09h00 a 11h30 sólo había llenado medio tanque. 

Tubería. Bolívar Cedeño, jefe técnico de la EPAM, reconoció el problema. 

Según el funcionario, la tubería de 4 pulgadas que abastece a estos lugares es muy angosta para la demanda de agua que tienen los sectores. 

Cedeño afirmó que la escasez seguirá hasta la próxima semana, cuando la tubería sea reemplazada por una de 12 pulgadas.