Desde hace más de una semana, varias familias del barrio San Rafael padecen de malos olores y contaminación por rebose de aguas servidas.

Frente a la casa de Silvino Mero hay derrame de agua servida. A pocos metros, cerca de la vivienda de Herminda Posligua, hay una “laguna” de agua negras.

“Fuimos al municipio a pedir que se repare la tubería y hasta ahora no tenemos repuesta”, dijo con tono de enojo una hija de Posligua.

César Chávez, morador del barrio Los Tamarindos, se queja por los constantes malos olores que emana el reactor que se ubica en su sector.

Otro problema que hay en Jaramijó son las roturas de las tuberías del sistema de agua potable.

Durante dos días, hubo derrame de agua frente a la casa del exconcejal Pablo González, ubicada en el barrio Honduras.

Lo mismo pasó en una calle del barrio Primero de Enero.

El concejal Abel Ávila es consciente del problema y se comprometió a solucionar el rebose de aguas servidas lo más pronto posible. “Aquí ya se necesita mejorar y ampliar el sistema hidrosanitario y ya se analiza en nuevos estudios”, dijo Ávila.

Jorge Gallardo, director administrativo del cabildo, señaló que se estudia la posibilidad de declarar el estado de emergencia para solucionar los problemas hidrosanitarios que se presentan a diario en Jaramijó.

El alcalde Bawer Bailón señaló que está solicitando un préstamo al Banco del Estado para ejecutar un plan integral hidrosanitario en Jaramijó.

Bailón aseguró que los reactores no funcionan adecuadamente, la estación de bombeo ya cumplió su vida útil y hay que cambiar las tuberías del sistema.