Y es que en ese sector en las noches y madrugadas circulan vehículos de carga pesada que transportan trigo hasta las fábricas y dejan caer parte del producto en todo su recorrido. Al siguiente día la vía está llena de semillas, las cuales son aprovechadas por los moradores del lugar como alimento para las aves 

que crían, dijo Jean Carlos Alvia.

Él es uno de los que se levantan temprano cada vez que esto sucede para recoger con una escoba y una carreta el trigo que cae de los camiones. Hay días en que recolecta hasta media carreta de trigo, que utiliza para darles a los gallos que cría para pelea. 

la venta. Pascual Figueroa es un obrero que limpia las calles de la ciudad. Casi siempre le toca por esta zona y cada vez que hay trigo en la vía lo recoge para darles a los pollos que tiene en su casa. Hay otros obreros, en cambio, que lo recogen y lo venden.

Ramón Párraga, ciudadano que casi siempre transita por el lugar, ha visto cómo los carros de transporte pesado van dejando el trigo en la vía. 

“Al parecer las compuertas van mal aseguradas, porque siempre sucede”, dijo  Párraga. 

Señaló que lo bueno es que hay gente que aprovecha el trigo que cae para reutilizarlo. Agregó que cuando se percata de la situación les pide a los obreros que trabajan por el lugar que recojan medio saco pequeño de semillas para llevarlo a casa y a cambio les da unas monedas. 

Los obreros de higiene aseguran que la vía a Costa Azul no es la única que se llena de trigo y de semillas. Éstas van cayendo desde la vía Puerto Aeropuerto, por donde pasan los vehículos con carga que salen del puerto hacia las industrias. Indicaron que a veces también cae cal.