Milenka Moreira, estudiante de administración de empresas, señaló que muchas compañeras relatan sus experiencias sexuales abiertamente. Es algo ya natural entre la juventud, dijo; sin embargo, cree que el tema aún no es tratado con madurez, pues tres de sus compañeras, que precisamente eran las que menos trataban el tema resultaron embarazadas. Una experiencia similar la tuvo en el colegio, mencionó.

Witney Cadena dijo que si bien ahora la juventud habla de sexo, mencionó que no se debe ser explícito y que además las personas deben saber a quién le cuentan sus experiencias.  

CONTROL. Isabel Ríos, máster en salud sexual y reproductiva, destacó que es importante hablar del tema sexual desde la niñez, pero señaló que debe ser un diálogo adecuado y veraz. “Llamar a las cosas por su nombre, no decir ni pipí, ni cosita, ni nada por el estilo”, mencionó.

Señaló que los padres deben ser muy comunicativos y explicarle cómo funciona el sistema antes de que el adolescente busque esa información entre amigos o en Internet, los cuales le pueden dar una información errada.

Indicó que la práctica sexual debe comenzar cuando la persona está lista física, emocional y hasta económicamente para afrontar una sexualidad responsable.

Agregó que en la edad de la pubertad, entre 11  a 19 años, hay cambios biológicos, anatómicos y psicológicos; por ello es más importante el nivel de conciencia allí porque la práctica irresponsable puede llevar a contraer enfermedades de transmisión sexual o embarazos no deseados. “De mis clientas adolescentes, el 99 por ciento no estaba preparada para embarazarse”, mencionó. Dijo que los jóvenes exponen su salud con enfermedades de transmisión sexual como el VIH, papiloma, virus cancerígeno, además de embarazos no deseados. Recomendó que toda mujer cuando inicie su actividad sexual se realice exámenes de papanicolaou. “Entre más temprano inicie su vida sexual más riesgos tiene, por ello debe hacer controles”, alertó. 

VIRGINIDAD. Para Alejandra Guerrero, madre de familia, hablar de sexo con sus hijas no significa que les dé licencia para practicarlo. Ella considera que la virginidad no es una cuestión de moda sino una situación que permite a las mujeres sobre todo a jóvenes evitar embarazos no deseados o enfermedades de transmisión sexual. Mencionó que a su hija Selena Solórzano, quien es modelo, le ha explicado el funcionamiento del cuerpo, de los órganos sexuales y la “intención” de los hombres. Señaló que si ella desea tener sexo no le impide que se case, pero que haga las cosas con responsabilidad. Yo me casé con velo y corona y así mismo espero que lo haga ella”, mencionó. 

IGLESIA. La iglesia católica también ha evolucionado en el tema de la sexualidad. El sacerdote Vicente Saltos señaló que el sexo en sí mismo es una realidad muy buena que conforma a la persona, pero aclaró que cuando no se lo valora en lo justa medida se convierte en algo desordenado y puede pasar como la libertad que se convierte en libertinaje. 

Dijo que el sexo tiene un canal que es el matrimonio por ello insisten a los jóvenes que se preparen para esa época. Recalcó que si se practica sexo antes del matrimonio la persona cae en un pecado.

Agregó que es conveniente que los padres conversen con los hijos del tema a medida que van creciendo, pues mencionó que no le pueden explicar lo mismo a un infante de 6 años que a otro de 10 ó 12 años.

Los jóvenes tienen confusiones en temas sexuales, según Isabel Ríos, ginecóloga y máster en salud sexual. Los principales mitos son:

> Eso es mentira, una mujer sí puede quedar embarazada en su primera relación sexual, si está en etapa de ovulación. 

> Muchas mujeres creen que si toman anticonceptivos antes de tener su primer hijo, luego cuando ya deseen tener no lo van a lograr, aquello dijo la experta también es mentira, ya que una vez interrumpido el plan de anticonceptivos se vuelve a fecundar.

> Aunque se eyacule fuera de la vagina puede haber embarazo, dijo.

MAYOR TOLERANCIA. La sociedad actual también ha evolucionado en cuanto a la tolerancia hacia las personas y sus inclinaciones sexuales. 

Nery Cedeño considera que ahora los homosexuales y lesbianas son aceptados tanto por sus familiares como por la sociedad en la que se desenvuelven, gracias a que hay leyes que los protegen y castigan la discriminación, aunque mencionó que también las personas se deben ganar el respeto más allá de lo que digan las leyes. “Si uno respeta, igual trato recibe”, dijo y mencionó que en su caso y el de sus tres hermanos sus padres aceptan sus tendencias y más bien lo apoyan en los emprendimientos que tienen. “A los 14 años confesé mi inclinación y me liberé de un peso, por suerte fue respetado y apoyado por mi familia”, acotó