Sin embargo, ante la decidida intervención de la mejoras programadas para lograr mayores facilidades ambientales para un mejor proceso educativo, se han presentado preocupaciones relacionados con el cuidado de las partes tradicionales de los edificios, que se dijo serían consideradas. De igual manera, es conveniente que la movilización de los estudiantes en la obligada reubicación sea adecuadamente programada, de tal manera que no signifique para los padres de familia bruscos cambios o problemas mayores de traslado, ni al mismo cuerpo docente y de autoridades la administración de los planteles.

Y si hay la muy buena intención,  lo mejor es hacer las cosas con calma para que no tenga muchos tropiezos, pues en el caso de Portoviejo y Chone, al parecer aún no está segura la ubicación de los locales donde irán a parar los estudiantes.