Las obligaciones de los ahora Gobiernos Autónomos Descentralizados (GADs) municipales dependen de la categoría en la que fueran ubicados, tomando en cuenta su capacidad, tamaño territorial y poblacional, entre otros, correspondiéndole a Portoviejo, por ejemplo, incursionar en controles de categoría dos.
Sin embargo, si bien esta descentralización es positiva, la realidad de la mayoría de las municipalidades les presenta inconvenientes para la ejecución de la disposición legal.
Específicamente en Manabí, deberá existir una coordinación muy cercana entre los GADs y la institución que continuará siendo el agente controlador de la circulación vehicular, como es la Policía Nacional, cuyo personal tendrá que seguir de brazo ejecutor de los controles, ante la carencia de efectivos municipales preparados.
Claro, a excepción de Manta, único cantón en la costa ecuatoriana en categoría uno y que ya posee su propio cuadro de vigilantes actualmente en actividad.