Mariana Rivera lleva algunos años vendiendo ropa en la feria que se realizó en las calles Ricaurte y Pichincha. “Esperábamos con ilusión que en estas fiestas pudieramos vender el doble y es por ello que adquirimos más mercadería, pero las cosas no se dieron”, dijo. 

 

Estas fiestas son muy concurridas no sólo por quienes habitan en el sector si no por las personas de otras ciudades que acuden al lugar para disfrutar de las celebraciones. 

Manuel Cedeño señala que la afluencia de personas fue muy baja. “Las fiestas son bonitas, pero la verdad faltó coordinación de parte de las autoridades, y por parte de entidades de salud”, recalcó.

“Los controles policiales fueron buenos, se vio mayor concurrencia de uniformados lo que evitó que se den desmanes”, indicó el ciudadano Wagner López.

diversión. Los juegos mecánicos fueron los más visitados por las personas, quienes aprovecharon el momento para divertirse un poco.

Otro de los puntos de diversión fueron los tradicionales bailes al ritmo de dos orquestas y varios artistas invitados que pusieron a bailar a  miles de personas.