Mientras se prohíbe el uso de estos cartílagos, China es atraída por el cacao ecuatoriano.
Jhon Vera, presidente de la Asociación de Comerciantes de la Pesca Incidental de Tiburones 5 de Marzo, señaló que el mejor mercado para las aletas de tiburones era China, pero hace dos años el Gobierno de ese país emprendió una campaña ecológica para evitar el consumo de los cartílagos que se extraen de las aletas de los tiburones.Señaló que en los centros comerciales más grandes de China, ubicados en la ciudad de Canton, las ventas han bajado en un 57 por ciento.
“Lo poco que está exportándose desde Manta, tiene como destino Corea y Taiwán, países que todavía no han sido alcanzados por la campaña verde contra el consumo de cartílagos de tiburones”, indicó.
Perú. Ante este inconveniente y abaratamiento de los precios del juego de aletas, la mayoría de los comerciantes opta por vender este producto en Perú donde los exportadores tienen un reintegro del 5% del total de las exportaciones por parte del gobierno, lo que no ocurre en Ecuador, anotó.
Explicó que hay comerciantes peruanos que vienen hasta Manta para abaratar la compra, “como también nosotros llegamos hasta la frontera (Huaquillas) a dejar la carga”, señaló Vera.
Precios. Ángel López, comerciante, informó que el precio del juego de aletas de tiburón rabón ahora lo compran en 13 dólares en Playita Mía, cuando hace dos años era de 50 dólares.
Las aletas del tiburón punta negra que costaban 120 dólares para exportación, ahora se compran en 40 y 50 dólares el juego, agregó.
López manifestó que toda la especie tiene un objetivo de consumo alimenticio.
La carne se comercializa en Manta y en la Sierra.